Ya me dirás qué tengo que hacer, ya que yo no tengo acceso, podrías contarme qué viene ahora según tu guion. A parte de lágrimas, idas y venidas. Espero morirme antes de que tus consecuencias me pongan la mano encima, antes de que me empapeles los párpados, la espalda y las manos con lo que no sabes pronunciar. Y de vuelta al hoyo. Centrípeta para siempre. Polilla y bombilla. ¿Cuánto vino tienes que tomar para mirarme a la cara?
Hombre lobo hombre.